Maquiavelo

Nicolás Maquiavelo 

Nicolás Maquiavelo, nació en Florencia en 1469, en el seno de una familia noble empobrecida pero con contactos con la burguesía florentina, la política y la alta sociedad en general. Fue un gran escritor y tratadista y al que muchos consideran como el padre de la ciencia política. Nicolás Maquiavelo vivió en la Florencia de los Médicis, en tiempos de Lorenzo el Magnífico y Pedro II de Médicis. En 1498 fue nombrado secretario de la segunda cancillería encargada de los Asuntos Exteriores y de la Guerra de la ciudad de Florencia, cargo que ocupó hasta 1512. Su principal objetivo político fue preservar la soberanía de Florencia, amenaza continuamente por potencias extranjeras. Para ello creó la milicia nacional en 1505. Aunque sin éxito, intentó el acercamiento de posiciones entre Luis XII de Francia y el papa Julio II, cuyo enfrentamiento terminó con la derrota de los franceses y el regreso de los Médicis a Florencia en 1512, momento que empezó la caída de Maquiavelo como político.  Maquiavelo fue apartado de todos sus cargos e incluso levemente torturado en 1513. 

Una vez libre Maquiavelo se retiró en las afueras de Florencia a una casa de su propiedad, donde comenzó la escritura de sus obras, entre ellas su obra maestra, El príncipe (Il principe), que Maquiavelo terminó en 1513 y dedicó a Lorenzo de Médicis, conocido como ‘el Magnífico’, a quien Maquiavelo explica cómo actuar y qué hacer para unificar a Italia y sacarla de la crisis en que se encuentra.  A pesar de la calidad de "El Príncipe" su obra maestra no se publicó hasta después de su muerte.  En 1527, las tropas de Carlos I de España entraron en Roma, lo que supuso la caída de los Médicis en Florencia y la marginación política de Maquiavelo, quien murió poco después de ser apartado de todos sus cargos. 

La mayor parte del pensamiento de Maquiavelo estuvo influenciada por el recuerdo amargo del esplendor de Roma, especialmente por la situación que atravesaba la mayoría de Italia, incluida Roma, que era continuamente conquistada y saqueada por potencias y gobernantes extranjeros. Maquiavelo anhelaba aquellos tiempos de gloria del imperio romano y, en cierta manera, sus escritos eran una guía para que los gobernantes florentinos, venecianos y romanos retomaran aquellos tiempos de conquista y de dominación de Europa. 

La obra de Nicolás Maquiavelo es fundamentalmente política, aunque también es considerada como una obra literaria. La guerra es un tema recurrente en Maquiavelo toda vez que esta es la actividad política más relevante que pueda emprender un Estado. De hecho, este llega a firmar en El Príncipe, quizás la obra más característica de Maquiavelo, lo siguiente: “Un príncipe no debe tener otro objeto, otro pensamiento, ni cultivar otro arte más que la guerra, el orden y disciplina de los ejércitos, porque es el único que se espera ver ejercido por el que manda (más frases de "El Príncipe"). También argumenta Maquiavelo que "la guerra es una actividad inherentemente política y quien no emprenda su análisis desde esta perspectiva yerra gravemente. Es más, y en tanto que choque de poderes, no es una actividad inherentemente sangrienta, sino inherentemente política. Ciertamente Maquiavelo anteponía los intereses del Estado ante cualquier otro, de ahí que defendiera argumentos tan categóricos como: "no existe guerra justa, sino guerra necesaria" o que "la acción política no necesitaba justificación alguna siempre que favoreciese al gobierno". También en línea con este argumento, el político florentino defendía que un gobernante no podía ser generoso, pues la historia demostraba que este principio llevaba al fracaso; ejemplo de esto es Julio Cesar, el emperador romano. Julio César fue incauto y confiado con el Senado y, en una de sus apariciones en la Cámara numerosos senadores le apuñalaron, entre ellos Bruto y Casio. Para Maquiavelo este episodio de la historia demuestra la verdadera naturaleza humana que hay que conocer para poder defenderte de ella. 

 Muchos consideran a Maquiavelo como "el padre" de la ciencia política moderna, al ser pionero en el análisis de un estado y su relación con la política, que tenía como máximo exponente "El Príncipe" quien Maquiavelo identificaba como el gobernante. Sus textos políticos e históricos son consecuencia de su experiencia diplomática al servicio de Florencia, como es el caso de Descripción de las cosas de Alemania (Ritrato delle cose della Alemagna, 1532). En su obra "Discursos sobre la primera década de Tito Livio" (Discorsi sopra la prima deca di Tito Livio, 1512-1519) defendió la teoría cíclica de la historia: la monarquía tiende a la tiranía, la aristocracia se transforma en oligarquía y la democracia en anarquía, lo que lleva de nuevo a la monarquía. 

El Príncipe, de Nicolás Maquiavelo, es un libro ampliamente leído y consultado en temas de estrategia política y negocios; su alcance va más allá del ámbito político y, para muchos, supone una referencia incluso para la vida cotidiana de una persona.  leer más.

Aquí enlace a "El Príncipe" en castellano


Según Maquiavelo existen dos formas de adquirir los principados: con las armas propias y con virtud, o con las armas y la fortuna de otros. 


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